El presidente de la República Laurentino Cortizo Cohen impuso la Condecoración Nacional de la Orden “Belisario Porras en Grado de Gran Cruz a Mariano Rivera por sus relevantes méritos y virtudes que lo han llevado a la fama y reconocimiento internacional.
De igual manera, el mandatario designó al beisbolista panameño como embajador deportivo de la República de Panamá por sus logros obtenidos a lo largo de su trayectoria como deportista, ostentando las mejores marcas de todos los tiempos.
Con este reconocimiento se le distingue como un ciudadano panameño de marcada probidad por sus hechos positivos que han denotado con su esfuerzo y humildad la identidad de los panameños, siendo una fuente de inspiración para las presentes y futuras generaciones.
Para el mandatario, Rivera con sus actos, esfuerzo y voluntad, suma glorias y paginas al libro de Panamá, la gente buena y noble como él construye páginas de honor. Así se alcanzan las metas, con trabajo duro, empeñado en salir adelante, aprovechando las oportunidades que nos presenta la vida, con perseverancia labrando la fama que hoy goza, alcanzándola con su humildad y su fe.
Este reconocimiento te lo entrega hoy tu Patria, el pueblo panameño, por ese esfuerzo, humildad y tu fe, para que tengamos un espejo en el cual mirarnos, como otros panameños honorables que han puesto su grano de arena para la construcción del país, dijo el presidente.
Rivera agradeció la iniciativa, lo que recibió con amor y calificó como algo especial, agradeció a Dios por bendecirlo a él y su familia, además de poder llevar el nombre de Panamá en alto. “No es lo que Panamá pueda hacer por nosotros, es lo que nosotros podemos hacer por Panamá, recalcó.
El exgrandes ligas panameño ha dejado un sello inconfundible para el béisbol, que lo ha hecho ingresar, de manera unánime y por primera vez, al Salón de la Fama del béisbol Mayor de Cooperstown, Nueva York.